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COLPISA / AFP
Jueves, 28 de mayo 2015, 01:09
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Un terremoto sacudió ayer los cimientos de la FIFA con la detención en Zúrich, a petición de la justicia estadounidense, de siete altos dirigentes sospechosos de corrupción, a dos días de las elecciones a la presidencia del organismo, en las que Joseph Blatter aspira a su quinto mandato. La votación de mañana se mantuvo en el programa previsto, al igual que el 65 Congreso de la FIFA, que dijo sentirse «víctima» del escándalo y que ofreció «colaboración plena» a las autoridades como «parte dañada».
Jeffrey Webb
(Islas Caimán)
50 años Vicepresidente de la FIFA, miembro del comité ejecutivo y presidente de la Concacaf. Banquero de profesión. Detenido.
Eduardo Li
(Costa Rica)
56 años Miembro del comité ejecutivo de la FIFA y del comité ejecutivo de la Concacaf y presidente de la Federación de Costa Rica. Detenido.
Julio Rocha
(Nicaragua)
64 años Responsable de desarrollo de la FIFA y expresidente de la Federación de Nicaragua. Detenido.
Costas Takkas
(Islas Caimán)
58 años Adjunto al gabinete del presidente de la Concacaf. Detenido.
Eugenio Figueredo
(Uruguay)
83 años Vicepresidente de la FIFA, expresidente de la Conmebol (Confederación Sudamericana) y presidente de la Federación Uruguaya. Detenido.
Rafael Esquivel
(Venezuela)
68 años Miembro del comité ejecutivo de la Conmebol y presidente de la Federación Venezolana. Detenido.
José María Marín
(Brasil)
Miembro del comité de organización de la FIFA para el fútbol olímpico y expresidente de la Confederación Brasileña. Detenido.
Jack Warner
(Trinidad y Tobago)
Exvicepresidente de la FIFA y expresidente de la Concacaf.
Nicolás Leoz
(Paraguay)
86 años Exmiembro del comité ejecutivo de la FIFA y expresidente de la Conmebol.
Alejandro Burzaco
(Argentina)
50 años Principal accionista de Torneos y Competencias S.A.
Aaron Davidson
(EE UU)
44 años Presidente de Traffic Sports USA Inc (Traffic USA).
Hugo Jinkis
(Argentina)
70 años Principal accionista de Full Play Group S.A.
Mariano Jinkis
(Argentina)
40 años Principal accionista de Full Play Group S.A.
José Margulies
(Brasil)
75 años Principal accionista de Valente Corp. y Somerton Ltd.
A los siete directivos arrestados, cinco latinoamericanos y dos británicos originarios de las islas Caimán, se les acusa de haber aceptado sobornos de cientos de millones de dólares desde los años noventa hasta ahora. El Departamento de Justicia de Estados Unidos imputó por corrupción a nueve miembros de la FIFA y cinco ejecutivos relacionados con el márketing deportivo, por hechos ocurridos en los 24 últimos años. Como vicepresidente de la FIFA, Ángel Villar es uno de los directivos que ha sido citados como testigo. La presentación de cargos y el arresto de los dirigentes de la FIFA son «el inicio del esfuerzo» para combatir la corrupción, según aseguró la fiscal federal del distrito de Brooklyn, Kelly Currie. «Es apenas el comienzo de nuestro esfuerzo. No es el fin», afirmó Currie en la misma conferencia de prensa en la que la fiscal general de Estados Unidos, Loretta Lynch, aseguró que los implicados «corrompieron los negocios del fútbol a escala mundial para servir a sus intereses y para enriquecerse».
Las acusaciones se relacionan con casos de corrupción en las atribuciones de sedes para los Mundiales y los derechos de márketing y televisión, según los cuales los implicados incurrieron en delitos como fraude, estafa y blanqueo de dinero. Sólo la organización de la Copa América de 2016 en Estados Unidos motivó sobornos por valor estimado en 110 millones de dólares, según la fiscal general estadounidense.
Como consecuencia de la orden de la justicia de Estados Unidos, la sede de la Confederación de Fútbol del Norte, Centroamérica y el Caribe (Concacaf), en Miami, fue registrada desde la madrugada del miércoles por agentes del FBI. Por su parte, la Fiscalía suiza se incautó de documentos electrónicos en la sede de la FIFA en Zúrich en una investigación penal por sospechas de «blanqueo de capitales y gestión desleal» en relación con la atribución de los Mundiales de 2018 y 2022 a Rusia y Catar, respectivamente.
«Representantes de medios deportivos y de firmas de márketing deportivo estarían implicados en pagos a altos funcionarios de organizaciones futbolísticas (delegados de la FIFA y otras personas pertenecientes a organizaciones afiliadas a la federación internacional) a cambio de derechos de difusión y de comercialización de competiciones organizadas en Estados Unidos y Sudamérica», explicó el Ministerio de Justicia, que dijo actuar a petición de la Fiscalía del Distrito Este de Nueva York. «Los pagos habrían transitado por bancos norteamericanos», se aseguró.
Los directivos detenidos, interrrogados por la Policía de Zúrich, son objeto de una demanda de extradición estadounidense. Quienes acepten ser extraditados a Estados Unidos -seis de los siete arrestados se opusieron ayer- lo serán según un procedimiento simplificado. En el caso de que rechazen ser trasladados, Washington tendrá un plazo de 40 días para llevar a cabo una solicitud formal de extradición.
Pese al golpe recibido, la FIFA, que suspendió provisionalmente a los dirigentes inculpados, se mostró convencida de que ayer pasará a la historia como «un buen día» para el máximo organismo futbolístico. «Esto es bueno para la FIFA, para su reputación y para la limpieza. No es un día bonito, pero también es un buen día. Las cosas avanzan y queremos tener respuestas», afirmó su portavoz, Walter de Gregorio, que insistió en subrayar que el presidente, Joseph Blatter, no está implicado en este asunto. También subrayó que la organización de los Mundiales de 2018 por Rusia y de 2022 por Catar no está amenazada.
83 años:
72 años:
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