Borrar
El Naturhouse no se deja sorprender en Guadalajara
balonmano

El Naturhouse no se deja sorprender en Guadalajara

Los de Logroño apretaron en defensa y encaminaron el partido hacia el triunfo antes de marchar al vestuario en el descanso

EFE

Sábado, 4 de febrero 2017, 19:27

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El Naturhouse La Rioja ha cumplido el trámite de sumar dos puntos en Guadalajara, derrotando al Quabit por 27-33. Los riojanos se alejaron en el marcador mediada la primera mitad, y no dejaron que los morados amenazan su victoria.

Cinco paradas de Jota Hombrados en el primer parcial permitieron al Quabit iniciar el choque en cabeza (2-1), pero dos goles del ex morado Víctor Vigo dieron inmediatamente la vuelta a la tortilla.

Gurutz Aguinagalde tomó el relevo en el turno de paradas, y Logroño empezó a escaparse. Con 3-7 en el marcador, antes de alcanzar el ecuador del primer periodo, César Montes, técnico local, decidió parar el crono.

La zaga riojana había neutralizado al máximo goleador de la escuadra alcarreña, Chema Márquez. El joven central madrileño se fue a lanzar desde diez metros y decidió intentar las penetraciones, para sumar un discreto registro de tres goles en la primera parte.

En el cuadro visitante las rápidas contras y sus extremos hicieron daño al rival. Hombrados veía llegar las hordas riojanas y no podía detener sus tiros de seis metros.

Don goles de Víctor Montoya metieron de nuevo a los morados en el partido (8-11). Entonces fue Jota quien llamó al orden a sus hombres.

Tras un intercambio de goles, corrió el Quabit y consiguió un parcial de 3-0, poniéndose a tan solo un gol de diferencia (13-14). Pero Naturhouse apretó en defensa y logró marchar al vestuario con una renta de tres. (13-17).

En la reanudación, Albert Rocas saltó al parquet para hacer tres goles y poner un 14-20 en el marcado. La defensa logroñesa mordía y los contraataques se sucedían. César Montes tuvo que pedir tiempo muerto.

El parón surtió efecto, porque sus pupilos apretaron los dientes y atacaron con valentía, terminando las jugadas. Pero con el transcurso de los minutos, volvió la normalidad a la cancha. Se antojaba imposible que el Quabit alcanzara a su rival, muy fiable en ataque.

Un tanto de Padilla y otros dos de Víctor Montoya, el mejor en el equipo alcarreño, animaron la grada y dejaron a su equipo a cinco de distancia de Logroño, para afrontar los últimos diez minutos de juego.

Mientras Kappelin sumaba nueve paradas en su arco, Jota Hombrados, que había hecho siete en la primera mitad, pasaba el relevo a Carlos Barbero.

Logroño alcanzaba su máxima renta, de siete goles. Sólo quedaba dejar pasar los minutos. La suerte estaba echada. A favor del Naturhouse.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios