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La plantilla del Naturhouse espera a embarcar en el aeropuerto de Barajas rumbo a Estambul. :: m.s.
Entrenamiento de 15 horas

Entrenamiento de 15 horas

Los franjivino se medirán mañana sin bajas al Metalurg, colista del grupo, pero igual de peligroso que cualquiera de los rivales Champions

MARTIN SCHMITT

Domingo, 16 de octubre 2016, 12:58

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skopje. El Naturhouse ayer no se entrenó. No pudo. Le fue imposible. Es lo que tiene vivir en una región como La Rioja, lejos de un gran aeropuerto. La plantilla del Ciudad de Logroño se pasó el día viajando hacia Macedonia. Después de ganar con solvencia al Balonmano Benidorm, apenas unas horas más tarde, a las 6.15, se subió al autobús con rumbo a Madrid para embarcar hacia Skopje, previa escala en Estambul, donde mañana jugará ante el Metalurg. Esa victoria del miércoles hizo que la paliza de viaje fuera más amena.

Un conjunto macedonio que, aunque marcha en la última posición del Grupo C, es igual de peligroso que cualquiera de los otros cuatro adversarios. Porque es la igualdad la que marca este grupo que lidera el Naturhouse y que, contra todo pronóstico, el gran candidato, el Montpellier, está sufriendo al sumar sólo dos puntos merced su victoria en casa frente al Tatran Presov. Nadie regala nada y el equipo que parecía ser la cenicienta, el Elverum noruego, derrotó al conjunto galo el fin de semana pasado.

El Naturhouse tardó más de 15 horas en llegar a su destino. Pero llegó en una pieza y sin ningún tocado, gracias a que Jota González dosificó a todo el equipo. Esta mañana, a las 11.00, se entrena por única vez en Skopje, una ciudad que no le trae buenos recuerdos. Hace un par de temporadas cayó injustamente por estas fechas frente al Metalurg en un encuentro que muchos de los que estuvieron presentes recordarán. En la penúltima jugada, y con el marcador igualado, Thiagus Petrus recibió dos faltas y los árbitros, en vez de pitar la evidente infracción, señalaron pasos del brasileño. Con diez segundos por delante y mientras los riojanos se quejaban, el Metalurg consiguió el gol de la victoria. Esa derrota está muy presente en aquellos jugadores que participaron de ese encuentro, caso de Ángel Fernández. «Fue tremendo pero hay que dejarlo atrás», indicó ayer el extremo izquierdo cántabro

Reunión de pucelanos

El partido del Naturhouse frente al Metalurg coincide el mismo fin de semana en el que el Pick Szeged de Juan Carlos Pastor se mide al Vardar de Raúl González, hermano de Jaime, el gerente del Naturhouse y uno de los mejores amigos de Jota González. De hecho, el mandamás del vestuario del Vardar estaba esperando a la delegación franjivina en el hotel donde se hospedarán.

La cuestión es que en la capital macedonia coincidirán, por unas horas, la columna vertebral de ese gran Valladolid que ganó su primer título y encandiló a España. En ese equipo, entrenado por Pastor y con Jota de segundo, jugaban Miguel Ángel Velasco, segundo del Naturhouse, David Davis, segundo del Vardar, Albert Rocas y Rubén Garabaya, entre otros.

Pero no sólo será un festival de entrenadores y jugadores pucelanos. En Skopje coincidirán los jugadores del Naturhouse con Álex Dujshebaev, exfranjivino y hoy uno de los jugadores más importantes de un Vardar que cuenta con Jorge Maqueda y Joan Cañellas entre sus filas, y Pedro Rodríguez y Thiagus Petrus, exfranjivinos jugando en Hungría a las órdenes de Pastor. Eso será después de entrenar. Jota González no gusta de dejar cabos sueltos y hoy harán un ensayo general de lo que puede ser el partido de mañana.

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