Debut franjivino con remontada

El Palacio de los Deportes quería ver a las nuevas adquisiciones del conjunto riojano. Y Ángel Montoro fue el primero en mostrarse. El lateral derecho se presentó con un golazo en el primer ataque, clavando el balón en la escuadra de un acertado Javi Díaz.

A partir de ese primer gol franjivino, el portero construyó una muralla y el Atlético Valladolid aprovechó las dudas defensivas para abrir un hueco en el marcador. En esos primeros compases, el Naturhouse defendió con sus torres Montoro, Garabaya y Molina, pero los atacantes pucelanos fueron demasiado escurridizos. El conjunto de Nacho González hacía especial daño con el pivote Abel Serdio.

Y aunque el resultado es lo de menos en estos partidos, los jugadores franjivino parecían heridos en el orgullo, lo que les llevó a precipitarse, a lanzar antes de tiempo, a ganar en nervios. Pero Jota González siguió a lo suyo, realizando pruebas como atacar con siete jugadores. Así, el Naturhouse se fue al descanso con un 10-15 preocupante.

Sin embargo, todo cambió drásticamente en la segunda parte. Cierto es que no estuvo Javi Díaz. Pero igual de evidente resultó que el bloque franjivino, con otra actitud, mejoró ostensiblemente. De hecho, para el minuto 40, los riojanos habían empatado el partido gracias a una buena defensa 5-1 y a un Gurutz Aginagalde efectivo.

Con el extremo cántabro Ángel Fernández como máximo artillero, el equipo de Jota González acabó ganando con comodidad a un Atlético Valladolid que terminó diluido y bloqueado.