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Marc Gasol, en un entrenamiento con la selección.
Marc Gasol, en el punto perfecto de madurez
BALONCESTO | MUNDIAL

Marc Gasol, en el punto perfecto de madurez

Junto a su hermano Pau, serán la pesadilla de los adversarios dentro de la pintura

Juanjo Martín

Jueves, 28 de agosto 2014, 01:00

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El chaval que entró casi por casualidad a formar parte de la generación dorada que hizo historia en el Mundial de Japón se ha hecho un hombre. Una lesión de Fran Vázquez abrió la puerta en el último minuto para que entrara Marc, el mediano de la saga Gasol y que hasta ese momento apenas había generado alguna noticia aparte de por ser el hermano de Pau. Sin embargo, tras el oro de Saitama en 2006 y su pase al Akasvayu Girona, el jugador inició un proceso continuo de madurez que ha conducido hasta su figura actual de center consagrado en la NBA.

Después de concluir su sexta temporada consecutiva con Memphis Grizzlies, Marc Gasol se ha ratificado como uno de los pivots más regulares de la liga estadounidense. En los últimos tres años, sus números en la fase regular se han estabilizado en torno a los catorce puntos y ocho rebotes de media, así como tapón y medio por partido. Junto a Zach Randolph forma una dupla interior que ha permitido a la franquicia de Tennessee clasificarse un año más para los play offs, un momento en el que el español siempre aumenta su importancia en los esquemas de su equipo.

Mientras que la campaña anterior alcanzaron el hito de llegar a las Finales de Conferencia donde fueron barridos por los Spurs (4-0) en el Oeste, en esta ocasión se tuvieron que conformar con hacer sudar de lo lindo a Kevin Durant y al resto de los Thunder. Los Grizzlies forzaron el séptimo partido de la primera ronda de la postemporada, aunque cayeron en ese duelo a cara o cruz (4-3) ante la ausencia por sanción de Randolph en ese último partido.

Con su futuro en Estados Unidos en el aire finaliza contrato en 2015, aunque ha expresado su deseo de seguir en Memphis, Marc Gasol llega a la selección española en un gran momento. El último partido oficial lo disputó a principios de mayo, por lo que la fatiga no debe ser un problema para un pívot que afrontó una temporada acortada por un esguince de rodilla. Eso sí, el jugador redujo el tiempo de recuperación, pues los pronósticos le daban entre ocho y diez semanas de baja y volvió a las pistas después de solo seis al mismo nivel que antes, como si nada le hubiese sucedido.

Este verano, Marc volverá a compartir la pintura de la selección con su hermano Pau, con el que demuestra una compatibilidad que hasta hace no mucho se discutía y que ahora nadie pone en entredicho. La movilidad del mayor de los Gasol y la inteligencia de ambos sobre la pista posibilita un juego interior temido por los adversarios, quienes sufren al hallar la forma de defenderlos y también al intentar encontrar un resquicio para mirar al aro.

La diferencia con años anteriores reside en el paso al frente que efectuó Marc durante el Europeo de 2013. En esa cita internacional, el cinco se echó el peso a las espaldas del combinado nacional y, junto a Rudy, lideraron la escuadra que se colgó un meritorio bronce por las señaladas bajas. Ese test consolidó aún más si cabe al mediano de los Gasol, quien quiere cerrar con un oro mundialista el glorioso circulo que ayudó a trazar hace ocho años en Japón.

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