Borrar
La plantilla del Clavijo atiende a su técnico en un receso del entrenamiento de ayer. ::
La última esperanza del Robusta
LEB ORO

La última esperanza del Robusta

El Clavijo intentará mantener la categoría, ganando en el Palacio o esperando a las inscripciones de la próxima campaña

Carlos Ferrer Yábar

Jueves, 27 de abril 2017, 01:01

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

logroño. Sólo le queda una bala en la recámara al Calzados Robusta para intentar mantener la categoría una temporada más, la sexta de su participación en la Liga Leb Oro. Ha sido una campaña muy irregular que, si el Cáceres no lo impide, acabará con el conjunto riojano en descenso para acompañar al Marín Peixegalego en su retorno a la Leb Plata, si no se produce el milagro habitual de cada temporada en los despachos.

Los técnicos y jugadores del Calzados Robusta son conscientes de que mañana se lo juegan todo para intentar mantener la categoría. Pero lo hacen a dos barajas. La primera, la que lleva anexionado el triunfo ante el Actel Força Lleida, otro equipo que llega a Logroño con todo hecho y sin más pretensión que mantener su prurito deportivo, por lo que conseguir la victoria no es tan necesario como lo es para el anfitrión.

La otra baraja es la que distribuye el juego en el Palacio Municipal de los Deportes de Huesca, donde el Magia Huesca se enfrenta al Cáceres. También tienen que ganar los locales y ante otro equipo que tampoco se juega nada más que la siempre denominada honra. Si los oscenses ganan, el Calzados Robusta dirá adiós a la categoría, sea cual sea su resultado en Logroño. Si ganan los riojanos y pierden los oscenses, el baloncesto de nuestra Comunidad mantendrá un equipo en Leb Oro. Si no, lo tendrá en Leb Plata. Y si pierden tanto Huesca como Robusta, el descenso es para el segundo.

Los despachos

Cierto es que no se puede contar con ello, pero a lo largo de las últimas temporadas han sido varios los equipos que han descendido y han terminado siendo repescados en el inicio de la siguiente campaña al no registrarse solicitudes de alta en la categoría.

Este año, además, en el que se debate la anulación del canon de ascenso a la ACB, son cinco los equipos de Leb Oro que tendrían derecho a jugar en la máxima categoría del baloncesto español, porque lo han conseguido en la cancha en ediciones anteriores y siguen mostrando su interés por un lugar en dicha competición. Palencia, Melilla y el antiguo Ford Burgos mantienen su disputa por un puesto en ACB y esta temporada se unirá el Gipuzkoa Basket, que ya se ha ganado plaza, y el equipo que resulte vencedor del 'play off' para cubrir la segunda plaza con derecho de ascenso.

En la pelea por el ascenso a LEB Oro, ya es de la nómina el Sammic de Azpeitia, que ha sido el vencedor de la Liga Regular. Para el otro puesto están clasificados equipos de ciudades que han vivido muchos años en ACB, como son Granada, Valladolid o Alicante junto a otras como Pamplona, Ávila, Zornotza, Cambados y Morón de la Frontera.

Es un clavo ardiendo al que se podría agarrar el Clavijo, aunque en principio utópico, dado el número de equipos que desean ese ascenso y la categoría de casi todos ellos en otras épocas del baloncesto nacional.

La pista

Todo pasa, como ha quedado claro, por ganar primero en la pista. La plantilla del Calzados Robusta se ha estado entrenando con intensidad esta semana decisiva. Sólo se muestra algo tocado Enric Garrido, que lo viene estando durante las últimas semanas, pero que ha cumplido sobre el parqué cuando ha sido necesario.

Antonio Pérez ha pedido a sus hombres compromiso y que den el máximo de lo que llevan dentro. «La gente es consciente de lo que nos jugamos. Es un momento duro, porque no dependemos de nosotros únicamente. La idea es aislar a los jugadores durante el partido para que estén centrados en lo suyo y no se puedan sentir mediatizados por las noticias que les puedan llegar del partido de Huesca», decía el técnico del conjunto riojano.

En la otra pista, la del Palacio oscense, también saben que necesitarán los puntos que dan el triunfo. El Cáceres no se juega absolutamente nada, como hace dos jornadas en Logroño y parte como víctima propiciatoria. Ahora bien, el Peñas sabe que si pierde el Clavijo está salvado directamente, por lo que tiene un mayor margen de maniobra que los riojanos. Así, tampoco se puede descartar la sorpresa. El Marín Peixegalego estaba descendido ya en la pasada jornada y venció al TAU en Castellón, donde los locales se jugaban la tranquilidad.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios