Secciones
Servicios
Destacamos
A. GÓMEZ
Domingo, 21 de septiembre 2014, 23:45
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
Los gritos de «¡Orenga, dimisión!» volvieron a escucharse en el Palacio de los Deportes. Sin embargo, en esta ocasión no fueron proferidos por la mayoría de la afición, como ocurrió el miércoles tras el histórico fracaso de España en 'su' Mundial, sino por parte de un grupo de seguidores que, ya que no hubo partido, al filo del descanso y, a tres minutos del final (120-85), cuando contagió a muchos otros, aprovecharon para reclamar la renuncia del seleccionador que continúa al frente de España aunque no por mucho tiempo, porque está sentenciado. Fueron unos breves momentos de 'animación' desde la grada entre tanta frialdad y oscuridad, porque los americanos, con un juego arrollador, se encargaron demasiado pronto de silenciar el Palacio, frustrado por no ver a España en la lucha por el oro. Más chafados se quedaron aún los aficionados que confiaban en que la batalla llegase al menos con vida al descanso, cuando Estados Unidos empezó su despegue en el primer cuarto. Sí es verdad que se llenó el pabellón para presenciar la final, pero sin España la diferencia fue abismal. En la cancha y en la grada.
Kyrie Irving fue el elegido como el Jugador Más Valioso (MVP) del torneo. El base de Cleveland Cavaliers completó un Mundial extraordinario y lo cerró siendo el mejor de la final (26 puntos, con seis triples sin error, y cuatro asistencias). Irving estuvo acompañado en el cinco ideal por el serbio Teodosic, el francés Batum, el estadounidense Faried y Pau Gasol.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.