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Una inyección de vida para los kamikazes del teatro Pavón

Miguel del Arco e Israel Elejalde capitanean el colectivo que apostó por el riesgo y la valentía que reconoció ayer el Premio Nacional de Teatro

MIGUEL LORENCI

MADRID.

Jueves, 5 de octubre 2017, 00:35

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Riesgo, valentía y excelencia van de la mano en el Teatro Kamikaze, la osada apuesta de Miguel del Arco, Israel Elejalde y otros 'fanáticos' de la escena, reconocidos ayer con el Premio Nacional de Teatro. Como una bocanada del 'viento divino' al que alude su nombre japonés, recibieron los temerarios kamikazes el galardón como «un espaldarazo a nuestro amor al arte». Como un reconfortante bálsamo tras «una dura travesía en la que las hemos pasado canutas».

Dotado con 30.000 euros y concedido por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, premia la osadía y el arrojo de unos locos de la escena que apostaron en plena crisis por la independencia y que insuflaron vida al histórico Teatro Pavón, hoy un escenario muy vivo convertido en una referencia de la escena más actual en el corazón del Madrid más castizo. Mas de 80.000 espectadores han pasado por el Pavón para disfrutar de alguno de los 36 espectáculos que han ofrecido hasta ahora.

Es un premio «ilusionante» para un colectivo que aborda su segunda temporada «plagada de incertidumbres», según destacó el autor y director Miguel del Arco. «Hemos abierto una brecha en el túnel y vamos a seguir adelante», dijo aclarando que la dotación económica servirá «para reducir nuestro enorme agujero financiero». Un balón de oxígeno para los responsables de una iniciativa que aúna «entretenimiento, reflexión, diálogo y transformación». Que tiene «la vocación de ofrecer una mirada contemporánea en la que cualquiera pueda verse reflejado», según destacó el jurado en su acta.

Se premia la valentía de un colectivo que apuesta por un «espacio vivo, abierto emocional e interactivo»

'Un teatro más allá de la función' es el lema de un proyecto forjado hace apenas un año, desde la consciencia de que era poco menos que suicida y que, sin superar todas las dificultades, aspira a afianzarse con el respaldo del público. «Su energía ha sido decisiva para esta épica empresa que debe afrontar aún enormes dificultades económicas», insiste Del Arco.

Agradece el respaldo de una Administración que recompensaba con el relevante premio su apuesta por «un proyecto colectivo en el que se desarrollan con excelencia las diversas ramas de la creación escénica: dirección, dramaturgia, producción e interpretación». Así lo destacó un jurado que también valoró la «valentía» de unas propuestas que le han procurado «la adhesión de un público fiel que respalda este proyecto único en el panorama actual de nuestro teatro».

'La función por hacer', 'Juicio a una zorra', 'Misántropo', 'Antígona' o 'Hamlet' -en coproducción con la Compañía Nacional de Teatro Clásico- son algunos de los montajes que han pasado por el escenario del Pavón en el último año. Todos con dirección y en versión de Miguel del Arco. 'Ensayo', estrenada el pasado 12 de septiembre, es la penúltima propuesta de estos optimistas kamikazes que funcionan «por amor al arte en el sentido mas directo de la expresión».

Del Arco es la cara más visible de un proyecto coral y privado, surgido en 2016 y que capitanea junto a Israel Elejalde en la dirección artística. Aitor Tejada y Jordi Buxó están a cargo de la gestión. Pudieron alquilar por cinco años el Pavón, situado a unos pasos de la plaza de Cascorro y la calles que acogen El Rastro cuando lo dejó la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC). Se embarcaron en la «arriesgada aventura» que suponía al alquilar el edificio y convertirlo en un espacio «vivo, abierto, emocional e interactivo». Lo han logrado unos profesionales «unidos por su manera de entender el teatro» y «avalados por las exitosas trayectorias de Kamikaze Producciones y Buxman Producciones», según dijo el jurado.

Ofrecen desde hace poco más de un año un teatro de calidad con todo tipo de propuestas escénica y variadas actividades para todos los público. Hay lecturas, ensayos, conferencias, formación y educación, tertulias en una programación que alterna montajes y obras propias con las de autores y compañías sin vinculación con el colectivo.

Teatro Kamikaze toma el relevo de Concha Velasco, ganadora en 2016 de un galardón han recibido Pedro Moreno Campos (2015), la compañía Chévere (2014), Ramón Barea (2013), Blanca Portillo (2012), y Juan Gómez-Cornejo (2011).

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