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Jueves, 5 de octubre 2017, 09:54
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La Universidad Popular de La Rioja, la Biblioteca de La Rioja y las librerías Santos Ochoa se han comprometido en la campaña 'Las bibliotecas son para el desierto' y recogerán libros de literatura infantil y juvenil y recaudarán dinero para los campamentos de refugiados saharauis en Tinduf. El objetivo es formar dos bibliotecas y sufragar los gastos de transporte de los libros reunidos. «Esta semilla pequeñita va a crecer y dar frutos, es un proyecto muy bonito en el que queremos implicar a todo Logroño y a toda La Rioja», anunció ayer José Manuel Calzada en representación de la UPL, entidad que quiere involucrar en la campaña a todos los alumnos de los talleres que imparte.
'Las bibliotecas son para el desierto' pretende reunir «no sólo los libros que nos sobran sino los que nos gustan y deseamos compartir», explicó José Manuel Calzada. «Queremos, incluso, que haya retorno, que los niños del Sáhara escriban cuentos y nos hagan dibujos y nos los manden y con ellos quizá podamos hacer una publicación», añadió. Los responsables de esta campaña han calculado que para transportar los libros que se recojan se necesitarán unos 3.500 euros a añadir a los 20.000 que costará construir las bibliotecas.
Toda esta acción, además, tiene como trasfondo, según declaró Calzada, «que no olvidemos la causa saharaui sin resolver: conseguir el proceso de descolonización en el que el Gobierno español sigue teniendo una gran responsabilidad; los dejamos abandonados hace 42 años».
JOSÉ MANUEL CALZADA
En este sentido, la presidenta de la Asociación Riojana de Amigos del Sahara, Cristina Manzanares, destacó que los entre 150.000 y 200.000 refugiados de Tinduf piden libros en castellano, a pesar de vivir en el sur de Argelia, «porque vienen a España, tienen familiares aquí y el contacto es permanente».
Sara Ibarrola, en nombre de las librerías Santos Ochoa, confesó: «Estamos encantados de poder participar en algo así y animamos a colaborar a toda la población». Por otra parte, Jesús Ángel Rodríguez, director de la Biblioteca de La Rioja, expuso que su implicación se debe a que «forma parte de nuestro deber creer que la lectura nos va a hacer más solidarios y sabios» y justificó que el centro que dirige funciona como «lugar de encuentro». «Las bibliotecas nos hacen ser mejores ciudadanos», afirmó Jesús Ángel Rodríguez.
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