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Sábado, 27 de mayo 2017, 01:19
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Tras vivir seis años en Berlín, Javier Triviño (Mondragón, 1985) llegó a Logroño en septiembre pasado. Aquí empezó a ayudar a Carmelo Argáiz en La Lonja y acabó habitándola durante cinco meses como artista residente. Fruto de este trabajo es la 'Kontuz!', exposición instalada hasta el 30 de junio, y donde el autor plasma en telas de gran formato diferentes imágenes, grafías e iconos que le han impactado a lo largo del tiempo.
Es el caso de algunas fotos familiares de Extremadura (origen de sus padres); pintadas del País Vasco (donde nació); un cartel del videoclub junto a su casa de Berlín (su última residencia tras pasar por Amsterdam, Portugal, Logroño -estudió en la Esdir- y Burgos) o las señales donde se lee 'Kontuz!' (Cuidado) y que advierten de la presencia de cazadores en los puestos de paloma de la vecina Sierra Cantabria. «Son iconos que simplemente a mí me atrapan, pero con los que no me siento identificado y por eso no tienen connotaciones». Triviño firma esta obra con el pseudónimo R.I.S. porque -explica- «necesitaba como despojarme de mi propia identidad para hacer lo que me diese la gana».
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