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La misionera de la Congregación de la Inmaculada Concepción Juliana Bonohá bromea acerca de sus gafas.
Juliana Bonohá: «Mi pensamiento  y mi corazón siguen en Monrovia»

Juliana Bonohá: «Mi pensamiento y mi corazón siguen en Monrovia»

La monja, vestida al estilo tradicional liberiano, muestra con emoción su agradecimiento al Gobierno y a los servicios sanitarios del Carlos III

JOSÉ MANUEL ANDRÉS

Martes, 2 de septiembre 2014, 00:54

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Vestida al estilo tradicional liberiano, con el gele, el turbante típico del país, cubriendo su cabeza, y luciendo la buba, prenda habitual en la zona donde ha desarrollado una intensa labor humanitaria durante los últimos años, apareció ayer en su primera comparecencia pública la religiosa Juliana Bonohá, que con una gran sonrisa expresaba su felicidad tras haber superado el duro proceso de cuarentena por el que ha tenido que pasar tras regresar a España.

Después de bromear acerca del olvido de sus gafas en el Hospital Carlos III, la misionera quiso trasladar públicamente su profunda alegría por volver a la normalidad y mostró su gratitud al Gobierno español y a todas las instituciones que participaron en el proceso desde su repatriación de Liberia, el pasado 9 de agosto, junto al sacerdote Miguel Pajares, que falleció días después.

«Mi pensamiento y mi corazón siguen en Monrovia, recordando a tantas personas que luchan contra el ébola sin apenas medios. Es duro pensar que yo estoy aquí mientras ellos siguen allí. Rezo por ellos todos los días», aseguró entre lágrimas la religiosa de origen guineano, que fue dada de alta el pasado jueves del centro hospitalario Carlos III, donde permaneció 21 días ingresada y aislada de manera preventiva. «Quiero agradecer de manera especial todo lo que han hecho desde la dirección del Hospital Carlos III y su personal sanitario», reiteró.

La misionera, profundamente emocionada al recordar a sus compañeros misioneros en Liberia, tuvo que interrumpir durante unos minutos su intervención. «Todo el mundo está haciendo grandes esfuerzos por detener el avance del virus. En todo lugar donde hay problemas ahí están los españoles», declaró la monja respecto a la lucha ante el avance de la enfermedad en África Ocidental.

En sus pensamientos permanece el misionero Miguel Pajares, que falleció el pasado 12 de agosto tras más de dos semanas de dura lucha frente al virus. «Miguel Pajares era un gran padre para todos, un misionero auténtico. Quiero dar las gracias a los Hermanos de San Juan de Dios porque nos enviaron a un santo», aseveró una conmovida hermana Juliana.

La misionera de la Congregación Misionera de la Inmaculada Concepción citó también a su compañera Paciencia Melgar, que finalmente logró superar la enfermedad en el Hospital San José de Monrovia. «He vivido con mucha alegría la recuperación de la hermana Paciencia Melgar», dijo la hermana Juliana con la voz entrecortada.

Juliana Bonohá fue sometida a varias pruebas de ébola, que en todos los casos dieron negativo, durante las tres semanas que permaneció en el Carlos III. Una vez superada la cuarentena recupera la normalidad en su día a día. «Me encuentro bastante bien, por el apoyo que he recibido y por todo lo que se ha hecho por mí. Ahora mi vuelta a Monrovia depende de mis superiores», declaró respecto a su futuro. Mientras tanto, el Ministerio de Sanidad de España, en colaboración con la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), ha aprobado la donación para el hospital de Monrovia de un cargamento con 11 toneladas de medicación y material sanitario de protección, valorado en 155.756 euros.

Negativo en Málaga

Por otra parte, el varón de 40 años ingresado en el Hospital Regional de Málaga no tiene ébola, según confirmaban ayer fuentes del Ministerio de Sanidad. El paciente, que estaba aislado y bajo todas las medidas de seguridad establecidas en el protocolo de actuación previsto ante sospechas de padecer la enfermedad, dio negativo en la analítica que le realizaron.

Además, dos sanitarios infectados por el virus del ébola en Liberia y que fueron tratados con el medicamento experimental Zmapp, se han recuperado por completo de la enfermedad y ya han sido dados de alta, informó el Gobierno liberiano.

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