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El viento dificultó muchos de los momentos de la procesión, como la llegada de los santos a la catedral. :: i. álvarez.
El viento empuja la fiesta en Calahorra

El viento empuja la fiesta en Calahorra

Tres generaciones de la familia Armas coincidieron en trabar las reliquias de San Emeterio y San Celedonio durante toda la procesión

Isabel Álvarez

Sábado, 4 de marzo 2017, 01:05

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El viento puso en algún que otro aprieto la salida, ayer, en procesión de los patronos de Calahorra, San Emeterio y Celedonio. Pero a pesar de la fuerza con la que arreciaba, el paseo de los santos calagurritanos por las calles de la bimilenaria ciudad se desarrolló sin ningún percance. Uno de los momentos más complicados se vivió a la llegada de los mártires a la parroquia de San Andrés.

El viento soplaba tan fuerte que se hacía imposible llevar el palio y las chicas del grupo de danzas Coletores tenían que sujetar con firmeza sus mantillas para que no saliesen volando. Un esfuerzo que tuvieron que triplicar los portadores de los pendones de las distintas cofradías de la ciudad y del Ayuntamiento. Este último sujetado por el concejal Esteban Martínez.

A pesar del vendaval, que fue más notorio en el recorrido por el casco antiguo, los calagurritanos acompañaron masivamente a sus santos. No obstante, la presencia ayer del rey Felipe VI en Logroño se hizo notar en la procesión, en lo que se refiere a la asistencia de autoridades regionales. Así, el alcalde, Luis Martínez-Portillo, y el resto de la Corporación municipal únicamente contaron como invitados con la consejera de Presidencia, Begoña Martínez; el concejal de Seguridad en el Ayuntamiento de Logroño; Miguel Sáinz, y la senadora del PP, Mariate Antoñanzas. A última hora, se incorporó el consejero de Políticas Sociales, Conrado Escobar, para participar en la misa solemne.

Un detalle que no pasó desapercibido fue el nuevo vestuario que lucieron los maceros municipales. Los trajes, que ya no llevan el complemento de la peluca, han sido confecciones según un grabado del calagurritano Pablo Torres.

Otra de las novedades en la procesión fue la participación de los Vendimiadores de Logroño del año pasado. Ambos desfilaron junto a la reina de las fiestas y sus damas, vestidas para la ocasión con el traje regional de 'Calahorrana'.

Y si la procesión con San Emeterio y San Celedonio es una jornada especial para los calagurritanos, más lo fue para el presidente de la cofradía de los Santos Mártires, Domingo Armas. Y es que, ayer pudo hacer realidad su sueño: el de trabar las urnas de los patronos de Calahorra junto a su hijo David y su nieto Íñigo. Pero es que, además, su nieta Cecilia les acompañaba con la muleta.

Al terminar la procesión, el obispo de Calahorra y La Calzada-Logroño, Manuel Escribano, ofició la misa solemne en la catedral, a la que también asistió el recién nombrado obispo de la Diócesis de Osma-Soria, Abilio Martínez.

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