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Quintos ausejanos del 75, este fin de semana. :: m.f.
Ausejo y sus imponentes vistas

Ausejo y sus imponentes vistas

Cada vez es más la gente joven que decide quedarse a vivir en un pueblo que antaño fue origen de disputa de reyes navarros y castellanos

MARÍA FÉLEZ* mariafelezherreros@hotmail.com

Miércoles, 4 de noviembre 2015, 00:51

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Ausejo. Si hubiese un concurso a la ubicación más original de un pueblo en La Rioja, sin duda alguna el campeón indiscutible sería Ausejo. El visitante que pisa por primera vez el municipio no puede olvidar nunca las enormes cuestas que hay que salvar para llegar al Ayuntamiento o a la iglesia y no puede evitar que se le pase por la mente la adrenalina que tienen que soltar los chavales bajando por ellas con sus bicicletas.

  • La historia

  • Prerromana se ha podido atestiguar que Ausejo estuvo poblada antes de la llegada de los romanos.

  • Edad Media los reinos de Navarra y Castilla se disputaron en muchas ocasiones sus tierras.

  • Los servicios

  • Para los pequeños está la escuela infantil y el colegio, cabeza del Centro Rural Agrario.

  • Para todos hay consultorio médico y salón cultural.

  • Para los mayores disponen de hogar de personas mayores.

  • Su paisaje

  • Urbano está ubicado en un intrincado sistema de bodegas y cuevas.

  • Desde sus miradores pueden verse los mejores paisajes de La Rioja Baja.

  • Su economía

  • Agricultura el vino y el champiñón son los protagonistas de la vida diaria de los ausejanos.

  • Industria además, en el municipio hay bodegas, cooperativas y negocios que dan trabajo a los vecinos.

  • Sus gentes

  • Asociacionismo una gran cantidad de asociaciones mueven la vida cultural de Ausejo.

  • Jóvenes muchos son los jóvenes que han decidido vivir en el municipio, un ejemplo claro es cada año la celebración de los quintos y la cantidad de niños que cada año acuden al centro escolar del municipio.

Allí, casi rozando el cielo, encaramado a un altozano, se encuentra el núcleo urbano de Ausejo, un municipio que ya eligieron los romanos hace más de dos mil años por sus evidentes ventajas defensivas.

Su castillo, del que poco queda, fue conflicto de disputas entre reyes navarros y castellanos durante años y después se desmanteló para recuperar la parroquia, afectada por el terremoto de 1817.

Porque los ausejanos son así, trabajan codo con codo por mantener vivo su pueblo y lo que podría ser un ejemplo de la despoblación rural, ha terminado siendo un ejemplo de recuperación de la juventud, en un pueblo en el que hay más gente joven que nunca.

No le falta ningún tipo de servicio. Los pequeños pueden ir a la guardería y al colegio, que es la cabecera del Centro Rural Agrupado (CRA), hay hogar para personas mayores, salón cultural y consultorio médico y, aunque el oficio de la mayoría está enfocado a la agricultura, no faltan un buen número de negocios donde encontrar trabajo.

Superpuesto en un intrincado sistema de bodegas y cuevas que antaño dieron quebraderos de cabeza a los vecinos por los continuos derrumbes, después de la realización de los muros de contención se ha convertido en una forma inusual de ver el municipio, donde casas que a simple vista tienen una sola altura, vistas desde otro punto pueden llegar a tener hasta tres.

Pero si algo destaca de Ausejo son las maravillosas vistas que se pueden contemplar desde sus numerosos miradores que, ahora en otoño, nos muestran la realidad cromática de un paisaje en el que no faltan viñedos, cultivos de cereal y pequeñas huertas.

El vino y el champiñón son fundamentales en el municipio con la actividad tanto de la cooperativa, que produce el primer vino riojano, como de la planta Eurochamp, que no sólo ha dado empleo a los ausejanos sino que ha llamado a un buen número de inmigrantes, que viven en total armonía con los vecinos de toda la vida.

Destaca también del municipio el buen cuidado de sus ermitas: una en el centro del municipio, en su parte más llana, la ermita del Crucifijo; y la segunda a dos kilómetros de la localidad dedicada a la Virgen de la Antigua.

No falta tampoco el movimiento ciudadano y las múltiples asociaciones no paran de realizar actividades a lo largo de todo el año. Una de las más novedosas fue la que se realizó este año, con la celebración del Día del Sarmiento, cuyas brasas son elemento imprescindible y diferenciador de la gastronomía en esta tierra, aportando un exquisito sabor a nuestros productos.

La asociación cultural ausejana, con su banda de tambores y cornetas de Nuestra Señora Virgen de la Antigua, la asociación de la tercera edad, la asociación sociocultural de mujeres de Ausejo, la 'Txalaparta Ausejana' o la sociedad cultural-recreativa 'Los Rebeldes' son ejemplo de una vida dedicada a mantener la actividad cultural del municipio.

Si un pueblo es ejemplo de la vida rural riojana, ése es Ausejo. Si es el mejor pueblo de La Rioja, sólo los votos lo decidirán.

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