El PSOE pide la revisión del Plan de Ordenación de Hospitales de La Rioja

El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista de La Rioja, Pablo Rubio, ha pedido hoy la revisión del Plan de Ordenación de Hospitales, que fue elaborado hace veinte años y debe ser adaptado ante las nuevas circunstancias de envejecimiento y cronificación de la población riojana.

En una rueda de prensa, Rubio ha calificado como "preocupante" la situación de "saturación" del Hospital San Pedro de Logroño, que es el centro de referencia en la comunidad.

El presupuesto de personal de este hospital ha descendido 7 millones de euros este año, ha lamentado, y la planta cuarta letra C está cerrada porque no tiene profesionales que atiendan sus 23 camas, que no se utilizan.

Además, ha alertado sobre la situación de "permanente colapso" del servicio de urgencias, donde hay pacientes que llegan a estar hasta 72 horas ingresados, en camillas colocadas en los pasillos o en "boxes" sin ventilación propia ni baño, ya que no les pueden trasladar a una cama en planta porque el hospital está lleno.

Como el Hospital San Pedro se abrió con idea de que solo hubiese un enfermo por habitación, existe una "insuficiencia de camas permanente", ha criticado.

Por otro lado, el Hospital de La Rioja se encuentra "infrautilizado", ya que, según sus datos, solo está ocupado en la mitad de sus camas, lo que supone "un despilfarro" de los recursos públicos.

Este hospital solo cuenta con las unidades de cuidados paliativos, psiquiatría y geriatría, ha precisado.

Frente a esta situación, el Gobierno riojano ha aumentado de 10 a 13 millones de euros este año el dinero destinado a conciertos sanitarios con otros centros, como Los Manzanos y Valvanera, donde se derivan pacientes, algo que a Rubio le parece "inexplicable".

Cuando hay pacientes que tienen problemas complicados son trasladados de la clínica privada de Los Manzanos al Hospital San Pedro, a pesar de que se paga el concierto, ha dicho.

Rubio ha indicado que en La Rioja hay casi 2,9 camas hospitalarias por cada mil habitantes, frente a la media nacional de 3,2, y, además, la región cuenta con una población más envejecida que precisa de un mayor número de ingresos.