ARAG-Asaja lleva la prevención de riesgos a 175 empresarios agrarios

Un total de 175 empresarios agrarios riojanos se han beneficiado del servicio mancomunado de prevención de riesgos de ARAG-ASAJA, que comenzó el pasado mes de septiembre, según ha informado hoy el consejero de Industria, Javier Erro.

Erro ha ofrecido estos datos en una rueda informativa junto al secretario general de ARAG-Asaja, José Antonio Torrecilla, en la que han presentado los primeros resultados de este servicio de prevención de riesgos mancomunado.

Según ha informado el Gobierno riojano, en una nota, se trata del primer servicio mancomunado de prevención de riesgos laborales que existe en el sector agrario riojano y que puso en marcha ARAG-Asaja con el apoyo del Gobierno de La Rioja, a través del IRSAL, el pasado mes de septiembre.

El objetivo de este servicio es facilitar a los agricultores y ganaderos el cumplimiento de la normativa sobre prevención de riesgos y contribuir a reducir la siniestralidad en el sector agrario riojano.

Su puesta en marcha, a primeros de septiembre, coincidió con la campaña de vendimia y ha sido utilizado por 175 empresarios agrarios, que contrataron a 1.299 trabajadores.

Tras el inicio del servicio de prevención, los técnicos responsables de la organización agraria desarrollan un estudio individualizado de cada explotación agraria para adaptar la prevención a sus necesidades específicas.

De enero a septiembre se registraron 151 accidentes de trabajo, 148 leves, 2 graves y uno mortal.

El 25,1 % de los accidentados eran trabajadores autónomos.

Respecto a la forma del accidente, el 33,6% fueron musculoesqueléticos y el 17,4% fueron causados por choque contra un objeto.

Los accidentes laborales registrados en el sector agricultura suponen el 7,10 % del total de siniestros registrados en La Rioja en este periodo.

En cuanto a los 1.299 trabajadores contratados; el 23 por ciento, eran nacionales, y el resto, extranjeros (comunitarios y extracomunitarios).

Por sexos, el 90 por ciento de estos trabajadores eran hombres y, por edad, el 53 por ciento tenían entre 25 y 40 años, el 20 por ciento tenían menos de 25 años y el resto eran mayores de 40.