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MARÍA JOSÉ GONZÁLEZ
Viernes, 30 de noviembre 2012, 02:14
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Bankia, grupo heredero de la actividad financiera de Caja Rioja, reafirmó ayer su "absoluto compromiso" con sus territorios naturales, las zonas de origen de las cajas de ahorros por cuya integración se creó. Pero, además, confió en su capacidad para volver a los beneficios (1.200 millones en el 2015) y a la rentabilidad, un objetivo para cuya consecución está dispuesto a afrontar un duro proceso de reestructuración, que incluye una importante redimensión de su estructura y de sus plantillas.
Según los términos del Plan Estratégico 2012-2015 presentado ayer por el presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri, el ajuste afectará en el conjunto del grupo a 6.000 trabajadores (28% de recorte), condición exigida por la Comisión Europea para conceder 18.000 millones en ayudas a Bankia, y supondrá la clausura de 1.100 oficinas (39%). Aplicando los porcentajes máximos de recorte barajados por la entidad, la reestructuración amenaza a 26 oficinas vinculadas a Caja Rioja y 66 puestos de trabajo en la comunidad.
La noticia completa, en Diario LA RIOJA y Kiosko y Más
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