Sindicatos: jueces y partes

Los dos sindicatos mayoritarios de la región se han visto abocados a adoptar medidas excepcionales sobre sus plantillas para adecuarse a las caídas de ingresos que registran sus arcas. Acostumbrados como están a representar a los trabajadores de todo tipo de empresas, el paso que han dado UGT y CCOO de La Rioja no es un plato de buen gusto: el primero ha presentado un ERE de 144 días que afectará a 31 de sus 37 empleados y, el segundo, también regulará los horarios y los salarios de 19 de sus 31 trabajadores.

El secretario general de UGT-Rioja, Javier Granda, confirmó ayer la presentación del expediente de regulación de empleo, que comenzará a aplicarse la próxima semana y se extenderá hasta finales del mes de noviembre. Granda explicó que esta medida, pactada con los trabajadores, ha sido «inevitable» debido a la merma que están sufriendo los ingresos de la central: no sólo han descendido las subvenciones que se reciben de las administraciones públicas para desarrollar programas, sino que cada vez hay más afiliados en desempleo, por lo que aunque no se den de baja pagan una cuota reducida.

UGT-Rioja cerró el pasado viernes un acuerdo con su plantilla tras varias semanas de negociaciones entre ambas partes. Finalmente, el ajuste temporal afectará a 31 personas que están contratadas por el sindicato, que verán ajustadas sus condiciones laborales y económicas durante 144 días.

El sindicato con mayor representatividad de La Rioja sigue así los pasos dados días atrás por la segunda central de la región, CCOO, que la pasada semana solicitó ante la autoridad laboral un ERE de nueve meses para 19 de sus 31 trabajadores, con aplicación del 1 de julio al 31 de marzo del 2013. Como en el caso de UGT, CCOO también justifica su decisión por la caída de los ingresos, tanto de los que recibe vía ayudas públicas (70%), como de los que logra a través de las cuotas restringidas de sus afiliados (10%).

La diferencia entre ambas centrales es que CCOO no logró alcanzar un acuerdo con los afectados, que ayer denunciaron en una nota de prensa que la dirección «se ha autoexcluido del ERE». A su juicio, esta actitud de los cuadros directivos de la central es «vergonzosa, amoral e insolidaria» por lo que les instaron «a considerar la alternativa de reducir la jornada y el salario de forma igualitaria a todos, incluidos los miembros de la dirección».

«Con buena fe»

En réplica, el secretario general de la central, Koldo González, recordó que CCOO de La Rioja «ha cumplido estrictamente lo que marca la Ley, es decir, que el ERE sólo puede afectar a los trabajadores que tengan un contrato laboral con el sindicato, circunstancia dijo en la que no se encuentra la dirección, como lo ha refrendado la oficina pública de Empleo». Además, insistió en que «el objetivo era evitar cualquier despido y lo hemos conseguido», y añadió que la central redoblará sus esfuerzos en la prestación de servicios a sus afiliados».

También aseguró que la dirección del sindicato «ha actuado en todo momento de buena fe y con absoluta transparencia» sobre el estado de sus cuentas.