Borrar
Robert y los parkercitos
REGIÓN

Robert y los parkercitos

PÍO GARCÍA blogs.larioja.com

Lunes, 16 de noviembre 2009, 02:22

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

HA venido Robert Parker a La Rioja y no creo que si resucitara en Logroño Nuestro Señor Jesucristo fuera tan agasajado: lo recibió el rey, el presidente autonómico, el mandamás del Consejo Regulador... sólo me extraña que el Vaticano no haya mandado al cardenal Somalo para asperjar un litro de agua bendita sobre el gurú más gurú de todos los gurús. Como los análisis sesudos no se me dan bien y además me aburren cantidad, únicamente se me ocurren dos razones para gastarnos un pastón en invitar a Parker: a) sufrimos síndrome de estocolmo; b) queremos ver si sobándole mucho la chepa logramos que deje de tener esa tirria tan manifiesta a los vinos clásicos de Rioja: esos vinos que tan poco le gustan al amigo don Roberto y que, sin embargo, han hecho que todavía seamos la denominación de origen más famosa de España y la única (ni Ribera ni Priorato ni historias) que se pasea por el extranjero con un poco de nombre. Como suele suceder con todos los gurús, el problema de Parker no es tanto él, sino sus seguidores. A don Roberto le van esas bombas tánicas que tienen más grado que el anís del mono y que dejan la copa manchada de tinta china. Qué le vamos a hacer. El problema es que haya tantos parkercitos que, como no tienen ni idea y se quieren dar el pisto, se guíen por sus puntuaciones y tantos bodegueros que crean que, si hacen el vino como le gusta a Parker, van a vender botellas y botellas a doblón. Y quizá sea verdad, pero yo, que soy bastante tozudo, estoy a punto de montar con tres o cuatro guerrilleros más una célula de resistencia para gritar bien alto: a mí me va el Rioja de siempre. Y si a don Parker no le gusta, peor para él.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios