Y el Ríver falla un penalti

Sin goles, pero con buen sabor de boca entre los aficionados que presenciaron el partido, finalizó ayer el encuentro entre el Ríver Ebro y el Fundación Logroñés, en el que los capitalinos partían como favoritos, y que tuvieron que pedir la hora al final, con dos hombres menos sobre el césped.

El partido comenzó con dominio del Fundación, que incluso tuvo la posibilidad de marcar, pero los postes se encargaron de devolver los disparos de Goñi, primero, y de Cai Palacios, después, en sendas jugadas de estrategia.

Jugaba tocando más el balón el equipo de Emilio Remírez, con Oussama y Pitu cubriendo la zona ancha y dando balones a los delanteros, pero es que también era esa la táctica que buscaba el técnico loca, David Pérez, que ofreció una parte del campo, para salir al contragolpe con sus hombres de arriba.

Baldero y Juanma eran una barrera imposible de superar por los visitantes, mientras que Vidorreta y Borja eran los encargados de hacer salir con fuerza a sus compañeros. Carlos León , arriba, era el que más se fajaba con la defensa ayer blanca.

En el segundo tiempo, el partido se perfilaba parecido, hasta que Iván Moreno fue expulsado por reiterar sus protestas en una jugada en la que pidió pena máxima. Con un hombre más, el Ríver se fue hacia arriba con mayor fluidez y llegó la jugada clave, porque Cali dio al balón con la mano y, a falta de seis minutos, el penalti podía decidir el partido.

Sin embargo, Ismael no pudo consumar la victoria local, al enviar alto el disparo desde el punto fatídico. Y el empate a cero goles fue definitivo